Llegaron los indios!

Cada mañana, ya no nos depierta ningún reloj, ni de cuerda ni digitales,
como los celulares; sino la algarabía de unos personajes matutinos.
Ellos son los indios que a las seis y treinta de la mañana, se oyen venir de lejos, unos gritos indígenas como:”uey uey uey ue ue ue”,y digo:"Fiallo levántate que ya son las seis y treinta, ya llegaron los indios", e inmediátamente nos levantamos para hacer nuestras tareas matutinas de todos los días (levantar a los chamacos para ir a la escuela, preparar los desayunos, etc.). Luego cuando ya estan frente a nuestra casa recogiendo a los pasajeros para llevarlos a su destino se oye un pito clásico primero(no puedo describirlo, imagínenselo ustedes), luego de ese pito tan chillón viene un “oye” y luego gritan a garganta pura las rutas como: ”La venta,nueve y medio, elevado”. Muchas veces de tarde cuando ya no tienen esa prisa por llenar sus voladoras, un grupo de ellos hacen tremendo escándalo hablando, no se porque hablan tan alto ¿serán sordos?, bueno señores pero no todo es malo con los indios, pues figurense que hace como tres o cuatro meses venía yo del colmado y cuando me subí a la acera me dí un tremendo estrallón y dos de los indios fueron los que me levantaron y luego me fui corriendo a mi casa con la cara tapada con las fundas de mis compras, pero nadie me vió afortunadamente, pues porque estaban las guaguas parqueadas allí en esos momentos.
El cabecilla o el que dirige es ”El Felo”, pana de nosotros, tanto así que cada vez que me vé me dice:” hey no se preocupe que yo le cuido el frente oyó?” y además saluda con mucho entusiásmo cada mañana a Fiallo y a los muchachos. En verdad los indios ya se han hecho parte de nuestras vidas cotidianas.

El Felo y Carlitos junto a su voladora.